Contigo no, Victoria

Cuando le pidieron a Confucio que manifestase el término que mejor caracterizaba una saludable vida en sociedad, dicen que Confucio contestó:

—Reciprocidad.

Hoy recordamos que Ortega Victoria convoca para mañana manifestaciones en toda España «para que la justicia se active» sin decirnos ni cómo quiere que se active ni cómo exigen los manifestantes «que se active».

—¡Ojalá que llueva café!
—¡Y dos huevos duros!

Y Victoria llama a que apoyen la manifa a esos abogados y abogadas a los que ella no apoyó cuando se concentraron en Madrid por la mejora de las condiciones del turno de oficio. Y Victoria llama a que apoyen la manifa a esos abogados y abogadas a los que ella no apoyó cuando se concentraron en Madrid para protestar por sus pensiones miserables. Y Victoria llama a que apoyen la manifa a esos abogados y abogadas a los que ella no apoyó cuando se concentraron en la puerta de sus juzgados reclamando dignidad para el turno.

Porque Victoria tiene la santa barra de pedir apoyo a esos y esas a quienes ella les ha negado hasta un lugar en esos «medios de comunicación» que le pagamos todos los colegiados. Si hubo manifestaciones en Madrid y en España ella lo ocultó porque los medios que pagamos todos Victoria no los tiene para informar sino para incensarla.

Y ahora Victoria pide apoyo a quienes ella negó lo que en justicia les correspondía.

Y yo no voy a ir.

No sé si Victoria lo entenderá o no, de hecho no sé siquiera si Victoria ha leído alguna vez a Confucio.

Deja un comentario