Cumpliendo sueños no soñados

Acto en la Real Academia de Jurisprudencia y LegislaciónVivir es ir acumulando recuerdos, si es posible buenos, y cumpliendo de vez en cuando esos anhelos íntimos que nos entusiasman y a los que llamamos deseos. Sin embargo, a veces, la vida es generosa y nos concede deseos que no nos atrevimos a anhelar por estar manifiestamente fuera del alcance de nuestras capacidades y esto me ha ocurrido a mí estos días.

El pasado día siete y sin duda por la extremada generosidad de un verdadero genio y maestro del derecho, Don Andrés de la Oliva, tuve el honor de compartir los estrados de la Real Academia Española de Jurisprudencia y Legislación  con tres personalidades del mundo del derecho además del propio Don Andrés que presidió el acto organizado por el Departamento de Derecho Procesal de la Universidad Complutense y la Real Academia, a saber:

Doña Soraya Amrani Mekki: Catedrática de Procesal. Universidad Paris Ouest-Nanterre La Defense. Miembro del Centre de Droit Pénal et de Criminologie, de la Commission Nationale Consultative des Droits de l’Homme y del Conseil Supérieur de la Magistrature.

Don Federico Carpi: Profesor Ordinario Emérito de Derecho Procesal Civil. Universidad de Bolonia. Ex-presidente de la Asociación Internacional de Derecho Procesal (IAPL).

Don Manuel Ortells Ramos: Catedrático de Derecho procesal de la Universidad de Valencia. Secretario General Ejecutivo de la Asociación Internacional de Derecho Procesal.

Como cualquier lector puede fácilmente imaginar encontrarme allí, compartiendo foro con ellos y hablando del «Estado y diagnóstico de la Justicia Civil» a un auditorio compuesto de catedráticos y profesores universitarios, es algo que jamás pude soñar. Pero esta vez la vida me sorprendió y me permitió cumplir un sueño que no pude soñar antes. Muchas gracias Don Andrés.

Merci Madame

Selfie con Soraya Amrani MekkiLa mujer que está conmigo en este selfie se llama Soraya Amrani Mekki dato este que, probablemente, no les diga nada; pero, antes de abandonar la lectura, déjenme que les cuente. Soraya Amrani Mekki es francesa e hija de padres absolutamente analfabetos (su padre, de origen argelino, se ganaba la vida como trabajador en las canteras). Soraya nació y creció en el conflictivo barrio parisino de Montfermeil, famoso no sólo por ser el emplazamiento de la posada de los Thénardiers en “Los Miserables”, sino por sus violentos conflictos sociales. He tenido la ocasión de compartir algunos ratos con ella estos dos últimos días y créanme si les digo que es una mujer admirable. Porque, joven como se la ve en la imagen que es, Soraya es Doctora en Derecho, es una de las mayores especialistas en Derecho Procesal Civil e imparte clases en la Universidad Paris-Ouest-Nanterre. A sus pocos años tiene un currículum prodigioso y una producción científica “tan masiva como las obras completas de Zola” (según cita del diario francés “Le Télégramme»). Entre muchas otras organizaciones es miembro de la «Commission nationale consultative des droits de l’homme” (CNCDH) pero, por lo que me interesa citarla en este post es porque es, además, miembro del “Conseil Supérieur de la Magistrature” (CSM) de Francia (el equivalente de nuestro Consejo General del Poder Judicial) a propuesta del Presidente de la República Francesa. Anteayer tuve el honor y el privilegio de compartir con ella no menos de cuatro horas de charla sobre los principales problemas que tienen los tribunales y la justicia en Francia y en España y no pude dejar de pensar en que me gustaría que los miembros de nuestro Consejo General del Poder Judicial escuchasen a los abogados de la misma forma en que me he sentido escuchado por ella. Gracias Soraya. Merci Madame.